Datos generales sobre Fernando Ortiz
Fernando Ortiz nació en La Habana el 16 de julio de 1881. Cursó sus estudios primarios en Menorca en las Islas Baleares y en donde obtuvo el título de Bachiller en 1895.
En 1891 consiguió el título de Doctor en Derecho por la Universidad de Madrid. Continuó estudios de Criminología en Italia. Allí hizo amistad con César Lombroso y colaboró en su Revista Archivio di Antropologia Criminale, Psichiatria e Medicina Legale.
A partir de 1903 cumplió misiones en el servicio exterior de la República en ciudades extranjeras tales como: la Coruña, Génova, Marsella y París.
Durante esta etapa entabló relaciones profesionales con destacados penalistas italianos y españoles. En 1906 pasó a fungir como Abogado Fiscal de la Audiencia de La Habana y obtuvo por oposición en 1909 la plaza de profesor en la Facultad de Derecho Público de la Universidad de La Habana.
Asimismo, obtuvo la Cátedra de Etnografía Cubana en ese alto centro de estudios. Formó parte del grupo de iniciadores de la Universidad Popular en 1914.
Apuntes sobre el legado cultural de Fernando
En las obras de Fernando Ortiz se destacan sus inquietudes políticas y sociolingüísticas. A partir de 1917 fue Representante a la Cámara por espacio de una década.
Trabajó en el Código Crowder en 1919. Tuvo a su cargo la redacción del “Manifiesto del 2 de abril de 1923″ de la Junta Cubana de Renovación Cívica. Entre 1931 y 1933 residió en Washington, desde donde llevó a cabo diversas actividades de denuncia contra el régimen dictatorial de Gerardo Machado.
A inicios de su estancia en los Estados Unidos participó en la sesión anual de la American History Association (Asociación Americana de Historia).
Su posición en defensa de la causa de los negros, así como su reivindicación de la herencia indigenista se puede apreciar en su obra El engaño de las razas, la cual fue preparada en 1944 con los materiales que utilizó en sus clases en el Instituto Universitario de Investigaciones Científicas y Ampliación de Estudios.
Desde el punto de vista de los estudios arqueológicos realizó notables aportes relacionados con las culturas aborígenes de Cuba.
En tal sentido pueden citarse entre sus investigaciones iniciales: Historia de la arqueología indocubana (1923) y Las nuevas orientaciones de la prehistoria cubana (1925).
Con respecto a su incursión en los temas relacionados con grupos étnicos de procedencia africana merecen mencionarse algunos aspectos que se desarrollan en sus obras: el histórico, en Los negros esclavos (1916); el filológico, en Glosario de afronegrismos (1924); y el etnográfico y folklórico en La africanía de la música folklórica de Cuba (1952) y Los bailes y el teatro de los negros en el Folklore de Cuba (1953).
Fue colaborador de numerosos órganos de prensa nacionales y extranjeros, tales como: Archivos Venezolanos de Folklore, Bohemia, Casa de las Américas, Cuba Contemporánea, El Cubano Libre, El Diluvio (de Barcelona), Derecho y Sociología, el Diario de la Marina, Diario Español, El Fígaro, Heraldo de Cuba, Ilustración Cubana, La Gaceta de Cuba, La Nova Catalunya, The Hispanic American Historical Review (de North Carolina, EE.UU.), Revista Científica Internacional, Revista de Administración, Revista de Arqueología y Etnología, Revista de la Habana y Universidad de La Habana, entre otros.
Fue el fundador y Presidente del Instituto Internacional de Estudios Afro-americanos desde el 20 de octubre de 1943.
Fue además miembro de la Sociedad Económica de Amigos del País a partir de 1907.
En la Biblioteca de la propia Sociedad fundó la Sociedad del Folklore Cubano en 1924 y tuvo bajo su responsabilidad la creación en 1936 de la Institución Hispanoamericana de Cultura.
Fundó y presidió la Sociedad de Estudios Afrocubanos en 1937 y presidió el Instituto Cultural Cubano Soviético en 1945. Falleció en La Habana el 10 de abril de 1969.
