
Contents
- 1 El carnaval santiaguero, una fiesta centenaria.
- 2 Carnavales Santiagueros, alegría desbordada.
- 3 Apuntes de una tradición
- 4 Las congas
- 5 Los paseos
- 6 El Carnaval Infantil
- 7 ¿Cuándo se realizan los carnavales en Santiago de Cuba?
- 8 ¿Dónde se realizan los carnavales en Santiago de Cuba?
- 9 Museo del carnaval en Santiago de Cuba
- 10 Diccionario del Carnaval santigüero.
El Carnaval de Santiago de Cuba tiene su origen en el siglo XVII, es el más antiguo y famoso del Caribe. Su origen llega de la religión católica cuando cada año los habitantes de la ciudad celebraban el día de Santiago Apóstol.
Marcaba el final de la zafra azucarera y era excepcional porque a los esclavos se les permitía desfilar por las calles de la ciudad y desarrollar sus bailes y tocar su música.
Fue el resultado de festivales conocidos como Mamarrachos, que eran fiestas donde se celebraba la cuaresma y los finales de temporadas de cosechas.
Dos principales fiestas se celebraban por entonces: el Carnaval de Invierno o Carnaval para los cubanos blancos y el Carnaval de verano o Carnaval de la Clase Baja.
Este último coincidía con el período de descanso para quienes trabajaban en los campos.
Estas celebraciones se extinguieron y con el paso de los años pasó de ser una fiesta tradicional a una popular. El resultado es el actual carnaval santiaguero, mezcla de tradiciones, ritmo y colorido.
Catalogado como patrimonio cultural inmaterial de la UNESCO, el carnaval de Santiago es el mejor de toda Cuba.
Así lo califican miles de personas que llegan a la tierra caliente, como también se conoce la ciudad por sus altas temperaturas durante todo el año.
Sucede aproximadamente en un período de diez, en los que la música, la alegría, el colorido y el baile, suceden ininterrumpidamente.
Pueden disfrutarse las congas, las comparsas, las carrozas y la gente sale a beber cerveza y a bailar. Una opción para nada despreciable es la música del órgano o música molida, que sobre todo es aceptada por los más añosos.
Por su arraigo, tradición y por el matiz que le aporta su gente, los carnavales de Santiago de Cuba son considerados los mejores de toda Cuba, una explosión de color, ritmos contagiosos, melodías y bailes.
En estos días se amanece en la calle compartiendo la cerveza y la comida que se oferta en los puestos callejeros. Un tiempo para olvidar las preocupaciones y reunirse con amigos y familia liberando tensiones con el baile y la música.
Apuntes de una tradición
Todos los años el Carnaval de Santiago de Cuba abre con una procesión en honor del patrón de la ciudad, encarnado por un artista.
Se inicia con fuegos artificiales lo que resulta no solo fiesta sino también el compartir entre las comunidades.
Previo a la celebración cada distrito prepara su carroza, comparsa o conga y se presentan en la Avenida de Garzón donde se ponen gradas para que el público disfrute ese espectáculo.
Un jurado que integran autoridades de la plástica, el teatro, la música, la danza y la literatura, observan y luego deciden quién se llevara el premio, que estará vigente hasta el próximo año.
Los días que siguen son de total fiesta en la calle, presentaciones de grupos, tomar cerveza, compartir, reír y bailar.
Cierra el carnaval como mismo abrió, con fuegos artificiales que marcan una despedida de 365 días hasta el próximo encuentro.
Las congas
Las congas de los carnavales santiagueros transitan arriba y abajo por las empinadas calles de la ciudad.
Se distinguen tambores, pero sobre todo la trompeta china, instrumento que singulariza y da un toque único en el país a esta manifestación.
Se acompaña del arrollar de la gente, arrastrando el calzado y con bailes rítmicos, coreando pequeñas estrofas que llegan de los momentos que se viven en el país o de dicharachos populares convertidos en cantos.
Las más populares resultan las de San Pedrito, San Agustín, Paso Franco, Alto Pino, El Guayabito y en particular, la de Los Hoyos, la más sobresaliente de todas.
Los paseos
Los paseos son otra manifestación importante en los carnavales. Los trajes, el colorido y la uniformidad de las coreografías que regalan a través de evoluciones, regalan un espectáculo inigualable. Las más importantes son La Placita, La Textilera, Heredia y Sueño.

El Carnaval Infantil, como identifica su nombre, es una opción para niños y niñas y se realiza una semana previa al carnaval de la ciudad.
Los niños preparan sus propias congas y comparsas, se presentan en competencia y optan por un título que mantienen durante todo el año hasta las nuevas competiciones.
Durante todo el día, generalmente sucede los domingos, se realizan actividades que se corresponden al sector infantil.
Presentaciones de magos y payasos, se ubican los aparatos en los que después del pago, los niños disfrutan de vueltas en carruseles, botes, tazas y otros, que resultan de la aprobación general.
La venta de confituras y algodón de azúcar caracteriza además estos momentos, aunque se expenden todo tipo de alimentos ligeros, así como refrescos y helados.
El Carnaval de Santiago de Cuba siempre se realiza en el mes de julio. Hubo una época en la que siempre estuvo fijada desde el 16 hasta el 26 de julio, fecha histórica de la ciudad.
Sin embargo el día que nunca puede quedar fuera es el 25, día de Santiago Apóstol, Patrón de la ciudad y que marcó con procesiones y otras actividades, las fiestas que hoy son un símbolo de la urbe caribeña.
El carnaval ocupa toda la ciudad, pero se ubican áreas fijas en los lugares más céntricos donde se presentan agrupaciones de música popular, otras destinadas a los jóvenes con música y los abuelos tienen sus propios sitios con música de su época.
Las más populares son Trocha y Cristina, Sueño, Santa Rita y Ferreiro.
El Museo del carnaval, en la ciudad de Santiago de Cuba, es uno de esos sitios que no puedes perderte si deseas conocer tradiciones y costumbres de las fiestas más esperadas por los nativos del oriente cubano.
Es único de su tipo en la isla y está diseñado para recrear y guardar este patrimonio de la nación. Se encuentra localizado en la Calle Heredia, muy cerca del parque Céspedes y la casa de la Trova, en una casona colonial preservada como en sus orígenes.
A partir de 1981 el lugar es la sede de la Comisión del Carnaval, grupo encargado de organizar las fiestas y del esplendor de carrozas, congas y comparsas.
Fue el año 1983 en el cual el museo cobró vida a través de imágenes con textos que explican, objetos, cronologías, instrumentos musicales y otros, de qué manera se llevan a cabo las fiestas y cuánto ha cambiado.
Se exhiben además maquetas de carrozas, trofeos, pendones, vestuarios, capas y adornos de calle, todos parte de esta fiesta conocida además como el Rumbón Mayor.
Cuando la urbe santiaguera celebró sus 500 años, el museo fue restaurado.
Ahora muestra las 3 etapas fundamentales del carnaval más popular de la isla: en la Colonia, en la República Mediatizada y después del triunfo de la Revolución, en enero de 1959.
Las agrupaciones que más destacan en los carnavales santiagueros tienen un sitio especial en el museo. Se muestran los instrumentos musicales del cabildo carabalí, la tumba francesa y de la conga santiaguera.
En su patio se reúnen los grupos folklóricos más importantes de la zona y allí se recrean los bailes legados por los ancestros africanos.
Para sumarte en total sincronía con el ambiente festivo debes conocer algunos términos utilizados en las fiestas.
Conga: estilo de música que tocan las comparsas en los carnavales
Comparsas: grupos de cantantes, músicos y bailarines disfrazados
Corneta china: instrumentos musicales similares a pequeñas trompetas
Farolas: farolillos de papel
Muñecones: cabeza de gran tamaño, confeccionada en papier maché para disfrazarse junto a un atuendo y desfilar, muchas veces asusta a los pequeños.