Contents
- 1 El Castillo de los Tres Reyes Magos del Morro, una visita obligada en Cuba.
- 2 El Castillo de los Tres Reyes Magos del Morro
- 3 ¿Quién fue el autor de esta obra representativa de La Habana?
- 4 El faro del Morro
- 5 Sobre la arquitectura del palacio de los Tres Reyes Magos del Morro
- 6 ¿Por qué visitarla?
- 7 El Castillo de los Tres reyes Magos hoy
- 8 ¿Cómo se llega al Morro desde La Habana?
El Castillo de los Tres Reyes Magos del Morro, una visita obligada en Cuba.
De vacaciones en Cuba no debes perderte la oportunidad de visitar El Castillo de los Tres Reyes Magos del Morro, una de las construcciones militares más sobresalientes e insignes de La Habana, capital de Cuba.
Es otro de los símbolos de la ciudad junto con el Capitolio y la Giraldilla ¿Qué podrás encontrar allí? Síguenos y lo descubrirás.
El Castillo de los Tres Reyes Magos del Morro
El origen del nombre de este castillo se debe en primer término a evocar a los tres reyes magos y también debido a la porción de terreno donde está enclavado, un sitio alto, rocoso, escarpado, aislado y a la orilla del mar.
Su nombre fue indicado por el rey Felipe II, quien en real cédula del 10 de diciembre de 1588, aclaró cómo debía llamarse este fuerte, y el de San Salvador de la Punta.
Años más tarde en otro documento consta que en la primavera de 1614 quedaba terminada la capilla del castillo y en su altar tenía un retablo de la adoración de los Reyes que era la vocación del castillo.
Su construcción comenzó a la misma vez que la del Castillo de San Salvador de la Punta, ambas custodiaban la entrada de la bahía de La Habana, ante el continuo ataque de corsarios y piratas.
La construcción del castillo se prolongó hasta bien entrado el siglo XVII debido a disimiles dificultades económicas y a las contradicciones que se suscitaron entre los gobernadores de la Isla y el arquitecto Antonelli.
¿Quién fue el autor de esta obra representativa de La Habana?
El Castillo de los Tres Reyes Magos del Morro fue trazado por el ingeniero Juan Bautista Antonelli en 1585.
La fortificación representa un polígono irregular que se ajusta a la forma del peñón sobre el cual se levanta de forma armoniosa.
Este castillo simboliza la clásica fortificación permanente abaluartada del siglo XVI, la defensa de la ciudad contra el ataque de corsarios y piratas. En muchas partes es inaccesible, tiene más de 60 pies de alto y está constituido de roca áspera.
El faro del Morro
El faro del Morro es quizás su elemento más distintivo. Por su historia, altura y utilidad actual es otro de los símbolos de la habana y aparece en sourvenirs que puedes llevarte de regreso como sellos de correos, medallas conmemorativas, litografías y etiquetas en las cajas de los famosos puros habanos.
Es uno de los paisajes que identifican a Cuba.
Emite destellos cada quince segundos, con una potencia de 200 mil bujías. Sobresale 45 metros sobre el nivel del mar y sus luces pueden ser vistas a 18 millas náuticas de distancia.
El Morro se proyecta hacia el mar con un ángulo agudo, allí se levanta la torre con el faro. La torre original de 10 metros de altura se sustituyó en 1844-1845 por la de 5 metros de diámetro y 30m de altura que puede verse hoy.
Se emplea como faro desde 1764, pero en el año 1844 la vieja torre fue demolida para levantar la que llega a nuestros días, electrificada en 1945.
Existieron varios proyectos para iluminar el faro desde 1816, El químico norteamericano Gabriel Pendergrast fue uno de los pioneros, sugirió montar doce reflectores capaces de ofrecer iluminación equivalente a 150 velas de sebo.
Pero el proyecto definitivo fue del ingeniero francés Agustín Fresnell, un hombre que revolucionó el alumbrado marítimo en el siglo XIX. Usaba para ello lentes escalonados, una máquina rotatoria y linterna central de forma prismática octogonal.
Sobre la arquitectura del palacio de los Tres Reyes Magos del Morro
La fortaleza se proyecta en las aguas con ángulo agudo y desde allí se escalonan y se abren sucesivas cortinas que alcanzan el lado posterior, el cual se comunica con tierra y está protegido por dos baluartes y un foso.
El frente de tierra tiene una cortina y dos medios baluartes asimétricos de 213, 28 metros.
Por el canal de entrada al puerto de La Habana hay otra cortina en la cual se acoplan dos medios baluartes también asimétricos y unas murallas quebradas de 227, 96 metros.
Por la costa aparece una plataforma y otra serie de muros irregulares que cierran la edificación de 223, 25 metros.
En sus tres lados tiene unos 664, 50 metros. El Castillo de los tres Reyes del Morro posee áreas interiores que se interconectan entre sí con sendas de acceso y comunicación adecuadas.
Hacia el noreste se levanta el medio baluarte de Tejeda y al sureste se sitúa el baluarte de Austria. Como parte de la defensa exterior que acompaña el frente podemos encontrar: el foso, la contraescarpa, el camino cubierto y el glasis.
El frente de mar que se encuentra ubicado al sur del canal del puerto está formado por una cortina con la entrada principal del fuerte al centro.
A la derecha aparece una cara del baluarte de Austria y a la izquierda el baluartillo de Santiago.
¿Por qué visitarla?
Te recomendamos visitar el Castillo de los tres Reyes Magos en La Habana por ser un sitio emblemático de la ciudad.
Además debes saber que es la más antigua fortificación construida por los españoles en América y que aparece como un símbolo de Cuba y su capital en muchísimos objetos comerciables.
El Castillo de los Tres reyes Magos hoy
Te peguntarás si solo encontrarás historia dentro de sus muros. La verdad es que el castillo de los tres reyes magos es mucho más. Hoy tiene una intensa vida cultural y turística.
La vista del litoral habanero es uno de sus tesoros.
Además sus salones funcionan como museos e incluye los populares restaurantes Los Doce Apóstoles y La Divina Pastora.
También podrás beber unos tragos en el bar El polvorín, ambientado a la usanza del siglo XVIII.
¿Cómo se llega al Morro desde La Habana?
Muy sencillo, se llega cruzando el mar. La forma más usual es cruzar el túnel de la bahía, una de las maravillas arquitectónicas de la mayor de las Antillas.
De paso por Cuba no dejes de visitarlo, es una experiencia única para combinar pasado y presente entre murallas que guardan la historia y regalan un panorama cultural novedoso, a la altura de todos los gustos.