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Porque viajar a Cuba en Otoño
Cuba es un lugar excelente para ir de vacaciones en cualquier época del año, pero en otoño se puede disfrutar la oportunidad al máximo.
Con un clima tropical y cálido pero con temperaturas menos sofocantes, la estación otoñal es apropiada para practicar el senderismo y el turismo de naturaleza.
Colores brillantes, una brisa que refresca, la oportunidad perfecta para recrearse con numerosas actividades al aire libre. Se puede descubrir Cuba de una manera diferente a la de tomar sol en una playa.
Para ello hay abundantes senderos, por ejemplo los de la Sierra del Rosario, cerca de Pinar del Río; el Escambray o Macizo de Guamuhaya, con sus espectaculares saltos de agua, situado entre las provincias de Sancti Spíritus, Villa Clara y Cienfuegos, en el centro de Cuba.
En provincias como Holguín una opción es subir la popular Loma de la Cruz.
En Pinar del Río, la invitación ideal es adentrarse en el misterioso mundo del habano, conocer Viñales y mezclarse con personas serviciales.
En Cienfuegos se puede disfrutar de paseos a caballo por la finca El Palmito, o extasiarse con la Laguna de Guanaroca y su mítica leyenda que cuenta la historia de una india del mismo nombre que descubrió a su hijo muerto dentro de un güiro, una especie de recipiente hecho de corteza vegetal.
Con el asombro el recipiente cayó a tierra y se rompió. Lo que aconteció entonces, fue un milagro: del güiro salieron peces que formaron los ríos que bañan el territorio de Jagua, la más grande de las tortugas se convirtió en la península de Majagua y las demás, en los cayos que hoy pueblan la bahía de Cienfuegos.
Santiago de Cuba es el sitio ideal para practicar el excursionismo, ya sea visitando la Comandancia de La Plata, en medio de las montañas, o explorando la Gran Piedra y el Parque Baconao (no te vayas sin probar la comida de La Casa de Pedro El Cojo, un restaurante típico muy conocido entre los locales y viajeros).
Además e este territorio se encuentra el Pico Real del Turquino. Con sus 1 974 metros de altura es el punto más elevado de la geografía cubana.
Con un exuberante paisaje donde abundan helechos, orquídeas y una gran variedad de hermosas aves endémicas de Cuba, se puede escalar saliendo del lugar llamado La Sierrita de Nagua en la ciudad de Bartolomé Masó en Granma.
Una vía más abrupta y arriesgada es por la parte de Santiago de Cuba, saliendo de La Mula. Por esta región el camino es más empinado (en el kilómetro 8 hay un campamento rústico donde puedes quedarte a dormir).
En casi todas las provincias del país hay a disposición del visitante estancias y visitas a Áreas Naturales Protegidas, Parques Nacionales, criaderos o reservorios de animales exóticos, observación de aves, cabalgatas, excursiones en embarcaciones a cayos protegidos, actividades de buceo contemplativo, snorkeling y la pesca deportiva.
En fin, que viajar a Cuba en otoño es una de las mejores elecciones para el que quiera conocer más de la isla.