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Las Parrandas en Cuba y sus datos generales
El municipio de Remedios en la provincia de Villa Clara engrandeció e influenció las tradiciones culturales cubanas con sus habituales Parrandas.
Este festival navideño, más conocido como «Las Parrandas Remedianas» se inicia el 16 de diciembre y concluyen el 24 de diciembre. Coinciden con las Misas de Aguinaldo correspondientes a la Novena del Niño Jesús.
Durante el desarrollo de estas Parrandas en Cuba la ciudad de Remedios se divide en dos bandos: «El Carmen» también denominados Carmelitas representados por el gavilán y «San Salvador» representados por el gallo.
La apoteosis llega el último día cuando tiene lugar la competencia de carrozas engalanadas, fuegos artificiales y trabajos de plaza. La fiesta comienza en la tarde y la celebración no concluye hasta el amanecer.
La eterna rivalidad entre ambos bandos se extendió a otros pueblos y ciudades. Por esta razón, las Parrandas Remedianas son consideradas como una de las tres Fiestas Nacionales más destacadas del país.
Surgimiento de las Parrandas en Cuba
Las Parrandas en Cuba surgen alrededor de 1820 gracias a la iniciativa de un sacerdote local llamado Francisco Vigil de Quiñónez (Francisquito).
Este clérigo decidió contratar a un grupo de niños para que en las frescas madrugadas del 16 al 24 de diciembre hicieran un ruido infernal y despertaran a los vecinos de la villa que preferían quedarse durmiendo y no participar en las misas de Aguinaldo.
Los niños de por aquel entonces recorrían las calles con pitos, fotutos, matracas, rejas, latas rellenas con piedras y todo aquello que hiciese un ruido espectacular. Para lograr materializar semejante tarea el pueblo se dividía en ocho barriadas: Camaco, El Cristo, San Salvador, El Carmen, Buenviaje, La Parroquia, Laguna y Bermeja.
Hacia 1851 se formaron dos grandes grupos rivales: El Carmen y San Salvador, capitaneados por Doña Chana Peña y Doña Rita Rueda respectivamente. Ellas demarcaron e iniciaron la primera estructura organizativa de la fiesta.
Por un lado aunaron sus fuerzas La Bermeja, La Parroquia, El Carmen y El Cristo y del otro lado La Laguna, Buenviaje, San Salvador y Camaco, aunque aún no existían competencia entre los barrios.
Ambos grupos contaban con un coro de cantores y tocadores de guitarra, bandurria, arpa, quijada de caballos, botijuela, corneta, clave y atambora, los cuales salían para animar las festividades.
En la actualidad
La tradición de las Parrandas en Cuba mantiene su vigencia hasta la actualidad.
Esta celebración comienza en la mañana con una peregrinación desde el Museo de las «Parrandas Remedianas» hasta el cementerio de la ciudad en donde descansan parranderos ilustres.
Entre las cuatro y las seis de la tarde los barrios alternan una entrada en la Plaza, donde se desarrollan los fuegos artificiales, las rumbas y el arrollado.
Alrededor de la diez de la noche comienzan las Parrandas con el saludo. Aquí cada barrio se presenta con música y fuegos artificiales.
Alrededor de la media noche se produce una relativa calma y en la Parroquial Mayor de Remedios, en medio del escenario, se celebra la Misa de Gallo.
Luego continúan las entradas con los más variados fuegos y la música de los conjuntos entonando las rumbas de desafío y las polkas.
Entre las dos y las cuatro de la madrugada hacen su entrada las fastuosas carrozas con sus historias, sus descubrimientos y sus personajes estáticos.
Otra vez los barrios lanzan sus fuegos artificiales en las dos últimas entradas de la noche. Al amanecer del día 25 de diciembre los barrios recorren las calles remedianas, proclamándose vencedores mientras entonan las rumbas de victoria al compás de los grupos.
Esta maravilla del folklore cubano no cuenta con un jurado que elija un vencedor, es por eso que el pueblo es siempre el triunfador.